Nuestra manera de pensar resulta decisiva y determinantes a la hora de entender el trastorno depresivo, la vulnerabilidad a padecerlo y el porqué de su mantenimiento en pacientes ya diagnosticados. Diríamos que los procesos de pensamiento se vuelven erróneos en estas personas.
Los individuos depresivos suelen mostrar en sus pensamientos una serie de errores cognitivos que sostienen los conceptos negativos sobre los que interpretan su existencia.
Se trata de seis tipos de errores de los que en último término se derivarán conclusiones muy negativas y desadaptativas y que se deben corregir a través de la intervención psicológica.
1- LA INFERENCIA ARBITRARIA
En primer lugar la inferencia arbitraria, que consiste principalmente en la obtención de conclusiones sin ninguna evidencia que las respalde o incluso cuando la evidencia es contraria.
*Un ejemplo de este tipo de error cognitivo, fácilmente reconocible en los depresivos y relacionado con los sentimientos de culpa característicos en este perfil, es aquel pensamiento del tipo “si disfruto de las cosas, no estaré pagando por lo que hago mal”
2- LA ABSTRACCIÓN SELECTIVA
La abstracción selectiva, consiste en ejercer una atención sesgada hacia elementos aislados o parciales de una situación. El depresivo de centra en un detalle del acontecimiento extraído fuera de su contexto, y lo hace ignorando otras características más relevantes de la situación, valorando al final, toda la experiencia en base al detalle.
*Como ejemplo, podríamos reparar en pensamientos del tipo “nadie me quiere”, cuando aquí se está ignorando el contexto de apoyo social de la persona, y “todo lo hago mal” cuando cometen un error e ignoran el mérito de una correcta realización en el resto de su tarea.
3- LA SOBREGENERALIZACIÓN
La sobregeneralización actúa sobre un pensamiento que funcionando de base, se generaliza a las demás situaciones. Se trata de un proceso en el que se genera una conclusión general a partir de un hecho aislado y se aplicar a situaciones no relacionadas entre si.
*Ejemplo: Un estudiante de universidad suspende un examen y a partir de esa situación piensa “nunca voy a acabar la carrera” y “mi novia me va a dejar por inútil”.
4- LA MAGNIFICACIÓN Y MINIMIZACIÓN
La magnificación y minimización, actúa de forma selectiva aumentando la magnitud de los acontecimientos negativos y disminuyendo la de los acontecimientos positivos. En todo caso, los acontecimientos son evaluados exagerándolos o infravalorándolos en base a la evidencia real.
*Esto ocurre por ejemplo en el ámbito laboral cuando se consigue un logro y en vez de asumirlo como un éxito se minimiza con pensamientos del tipo, se piensa “bueno, el éxito durará poco tiempo”, o cuando recibe una reprimenda por parte de su superior y concibe una idea del estilo de “ya nunca le voy a caer bien”, maximizando la situación.
5- LA PERSONALIZACIÓN
La personalización se refiere a la tendencia que exhibe la persona a atribuir acontecimientos externos a sí mismo, creyendo siempre que están relacionados o referidos a su persona, sin que exista evidencia para ello.
*Para ejemplificar este tipo de error cognitivo, podemos tomar como marco referencial un encuentro social en el que en determinado momento se hace un silencio en un cambio de conversación y a raíz de esta interrupción la persona pensaría “están todos pensando que les caigo mal”.
6- LOS PENSAMIENTOS ABSOLUTOS
Los pensamientos absolutos y dicotómicos, definen la clasificación en categorías opuestas que hacen los pacientes con las situaciones, saltándose la evidencia de valoraciones y hechos intermedios.
*Es fácil reconocer en los pacientes ejemplos de este tipo de error, pues su tendencia es a expresarse en términos de todo o nada, siempre o nunca, bueno o malo, si o no…
La conducta mental, o el desarrollo del diario vivir tratando de ser lo menos lesivo con quienes te rodeas o encuentras, como debe de ser. No es que piense que mi capacidad mental es superior, lo cierto si es que, con quienes me relaciono, me tratan de demostrar que estoy equivocado, por una opinión, que siempre la sostengo por experiencias vividas y aprendidas o aplicando en todo su rigor el (sentido común). Es decir la lógica.